Ocho entidades y movimientos reflexionan y trasladan su discurso crítico en el marco de la Escuela de Som Energia
Ocho organizaciones han debatido y reflexionado este fin de semana sobre la emergencia climática y el papel que tienen los movimientos sociales a la hora de intentar revertir sus impactos sociales y económicos. Ha sido en el marco de la Escuela de Som Energia, que ha reunido a más de 350 personas en Mataró (Barcelona). La cooperativa de energía verde, que tiene como objetivo cambiar el modelo energético por uno renovable y democrático, trabaja para transmitir un discurso crítico y encarado a fomentar una transición energética transformadora.
«La desobediencia civil y la construcción de alternativas son complementarias para afrontar la emergencia climática», dice Lourdes Berdié, de Justicia Climática. Gemma Barricarte, de Fridays for Future, añade que no sólo son complementarias sino que «son necesarias y deben estar en diálogo permanente. Una de las alternativas es la construcción de cooperativas «. Délia Laurent, de ClimAcció, coincide con Barricarte en que «los movimientos sociales estamos poniendo los cuerpos en esta lucha», y detalla que «participamos con el cuerpo a través de la acción directa y la desobediencia civil no violentas». Desde Extinction Rebellion, Llorenç Witty alerta de que «si hacemos incidencia sólo política, sin movernos, sin hacer ruido, no cambiará nada». Para Witty, «no podemos continuar con nuestra cotidianidad; debemos movernos, nos jugamos la vida «. Simon Weiland, de 350 Barcelona, explica que «hacemos acciones para concienciar a la gente y promover un cambio en su forma de consumir». Alfons Pérez, de By 2020 We Rise Up, recuerda que «también hay que cuidar», y recurre al ecofeminismo para aportar esta conciencia de autocuidados y de poner la vida en el centro.
Sara Pizzinato, de la Fundación Renovables, está convencida de que «sólo la movilización ciudadana forzará la transición hacia un nuevo modelo energético que afronte la emergencia climática». Y es que, añade Pizzinato, «la transición energética no vendrá de las grandes empresas, el cambio vendrá de la ciudadanía empoderada». Desde Ecologistas en Acción, Luis González alerta de que «ya no tenemos tiempo de ‘preparar’ la transición, ahora ya está aquí». Para González, «la distribución de la energía debe ir en relación a las necesidades de las personas, no a las necesidades del capital». En medio de este panorama, Pizzinato destaca que, hasta ahora, el imaginario colectivo sobre qué es tener éxito personal pasaba por tener coche y casa. En cambio, «ahora se añade el hecho de tener placas solares de autoproducción».
Cerca de un millar de personas siguieron online estas charlas y demás ponencias de la Escuela a través de la transmisión en directo. Siguiendo con el objetivo de transmitir conocimientos, compartir y generar debate, Som Energia colgará, durante los próximos días, los vídeos de las charlas en el canal de Youtube de la cooperativa. En esta 8ª edición de la Escuela, Som Energia ha celebrado que ya tiene 60.000 personas socias y más de 100.000 contratos de electricidad de origen 100% renovable.
Más información: comunica@somenergia.coop
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