Comiat de l’Ana Marco

En esta Asamblea 2016 se cumplen mis 4 años de mandato en el Consejo Rector de Som Energia y, como no es bueno eternizarse en los cargos, creo que es hora de dar paso a otros que aportarán nuevos saberes y experiencias.

Toca cambiar la Presidencia por el activismo de base en mi grupo local de Zaragoza, donde tendré el mismo salario pero un poquito, solo un poquito menos, de responsabilidad.

Me hubiera gustado despedirme en vivo y en directo pero mi hija acaba de regresar tras pasar el curso escolar bastante lejos y además, precisamente hoy, es el cumpleaños de mi compañero y padre de la criatura así que no me puedo escaquear de la celebración familiar y se impone la conciliación.

¡Cuatro años ya! Parece que fue ayer y, a la vez, es como si hubiera pasado toda mi vida en Som Energia.

Muchas cosas han cambiado desde la Asamblea de marzo del 2012 donde fui elegida miembro del Consejo Rector.

Para empezar éramos poco más de 2.000 socios y ahora somos casi 26.000.

Ese año pusimos en marcha la primera cubierta fotovoltaica en un tejado de Lleida.

A día de hoy tenemos siete más, una planta de biogás, una central mini hidráulica, varias plantas salvadas de los fondos buitre, una gran central en Sevilla y un proyecto eólico de autoconsumo colectivo…

¡No está mal en 4 años!

En una suerte de justicia poética, mientras el ministro Soria dedicaba su siniestra legislatura a destruir, otros muchos nos hemos ocupado de poner los cimientos para construir un mundo más justo y razonable. Así, a la chita callando, hemos aprovechando bastante bien las escasas rendijas que dejaba este sistema, que espero esté a punto de caducar.

Me siento orgullosa de haber puesto mi granito de arena en este empeño y, sobre todo, me siento muy afortunada de haber compartido el camino con un montón de gente valiente y digna que ha puesto a disposición del proyecto común todo su conocimiento, esfuerzo y alegría.

Esa gente que sois vosotros, mis amigos.

¡Gracias y hasta siempre compañeros!

Ana Marco
28/05/2016