Modificaciones extraordinarias de potencia durante el estado de alarma

[També en: català]

Las cinco grandes distribuidoras de electricidad: E-Distribución (antigua Endesa Distribución), I-DE (antigua Iberdrola Distribución), Unión Fenosa Distribución, e-Redes (antigua EDP-HC) y Viesgo Distribución, han acordado permitir reducir la potencia contratada aunque no hayan pasado 12 meses desde la última modificación contractual. La medida es válida sólo mientras continúe vigente el estado de alarma decretado por el gobierno español debido a la crisis ocasionada por el coronavirus.

¿A quién va dirigida?

Esta medida está pensada para todas aquellas empresas y negocios que tienen una de las cinco grandes distribuidoras, y que han tenido que cesar, reducir o modificar su actividad debido a las medidas decretadas durante el estado de alarma. Es importante, sin embargo, valorar bien si sale a cuenta o no hacer el cambio, ya que en algunas casuísticas puede salir más caro.

¿Cómo puedes saber cuál es tu distribuidora?

La distribuidora depende de la zona donde vives. Puedes ver cuál es la distribuidora de tu zona en la primera página de la factura, en el apartado de averías y urgencias.

La mayor parte del territorio estatal (aunque no todo) está cubierto por estas cinco grandes distribuidoras:

¿Tiene algún coste?

Sí, disminuir la potencia tiene un coste regulado por ley de 10,94 euros (IVA incluido). Hay que tener en cuenta que volver a aumentar la potencia hasta el nivel que se tenía previamente también tiene un coste: 10,94 euros más los derechos de acceso, a razón de 23,84 euros por cada kW de aumento (IVA incluido).

Viesgo Distribución y E-Redes han anunciado que no cobrarán el coste de las disminuciones de potencia que se soliciten durante el estado de alarma. Además, permitirán volver a aumentar la potencia al nivel anterior sin coste (durante el estado de alarma y unos días posteriormente, aún por determinar).

¿Así pues, cuándo es recomendable reducir la potencia?

Depende de cada caso, y se deben tener en cuenta diferentes aspectos para valorarlo. En general, sin embargo, sólo es aconsejable para la mayoría de contratos que tienen más de 15 kW de potencia contratada (tarifas 3.0A, 3.1A o 6.1A).

El motivo es que en estas tarifas es posible bajar la potencia de dos periodos, y mantener la potencia máxima sólo en un periodo (en este caso sería recomendable que fuera el más barato, en las tarifas 3.0A y 3.1A es el periodo 3), por lo tanto se mantienen los derechos de acceso. Así pues, cuando se quisiera volver a las potencias anteriores, sólo habría que abonar los 10,94 euros (porque no se trataría de un aumento de potencia sino de una modificación).

Para las tarifas 2.0 y 2.1 deberían pasar unos cinco o seis meses (dependiendo de cada situación) para que saliera a cuenta.

A continuación hay tres simulaciones, son ejemplos con diferentes casuísticas. En caso de que alguna distribuidora, aparte de Viesgo y E-Redes, decidiera eliminar algunos costes, los ejemplos deberían actualizarse.

A tener en cuenta: es importante valorar cuál es la potencia mínima necesaria para los aparatos eléctricos que seguirán estando en funcionamiento. Por otra parte, en caso de disminución de la potencia contratada (y no de modificación, como podría pasar en los casos de la tarifa 3.0A, 3.1A, 6.1 y superiores) si el punto de suministro tiene más de 20 años, en el momento de recuperar la potencia inicial la distribuidora puede solicitar un nuevo boletín de la instalación eléctrica. Estos boletines los emitire personal electricista cualificado, y tienen un coste económico (entre 100 y 200 euros).

¿Cómo se pueden solicitar los cambios?

Los cambios se pueden solicitar a través de la Oficina Virtual de Som Energia, en el apartado «Contratos > Modificar la potencia contratada».

¿Cuánto tiempo puede tardar en hacerse cada cambio?

Desde que se solicita a través de la Oficina Virtual, en caso de que se acepte el cambio y no se tengan que hacer actuaciones en campo, pueden pasar entre 5 y 12 días naturales. En caso de que sea necesario realizar actuaciones en campo (por ejemplo, cambiar el contador), en condiciones normales la distribuidora dispone de 15 días naturales para hacer efectivo el cambio desde que acepta la solicitud. Las medidas excepcionales podrían afectar al personal técnico que debería hacer este trabajo. En caso de rechazo de la solicitud (por ejemplo, por falta de documentación), hay que volver a iniciar el proceso y tramitar una nueva solicitud.

Importante: en los contratos que facturen por maxímetro, cuando se prevea que la empresa podrá recuperar la actividad normal, es recomendable volver a solicitar la modificación de potencias lo antes posible. La empresa podrá utilizar más potencia de la contratada en cualquier momento (ya que el maxímetro lo permite), pero si el cambio contractual aún no está hecho, se deberá pagar la penalización por haber superado la potencia contratada.

¿Y si la distribuidora es otra?

Si la distribuidora no es ninguna de las que han acordado esta medida extraordinaria, también se puede solicitar una disminución de la potencia contratada, pero la distribuidora podría rechazar la solicitud de reducción si hace menos de 12 meses desde la última petición. En todo caso, habría que valorar también los costos que implicaría, para saber si saldría a cuenta hacer el cambio.